En Mayo de este mismo año, CEPREDE elaboró un interesante y extenso estudio sobre la cadena de valor de la celulosa, el papel y el cartón.
Entre los objetivos de este estudio se encontraba el de cuantificar la importancia socioeconómica de la cadena de valor del papel y el cartón, mostrar de manera tangible la contribución de la cadena sobre la economía española y, también, como las nuevas tecnologías y su compromiso con la sostenibilidad han mejorado su eficiencia.
Pero… ¿qué es una cadena de valor?
Una cadena de valor es un modelo teórico que permite describir el desarrollo de las actividades de una organización empresarial generando valor al producto final. El concepto fue descrito por primera vez en 1985 por Michael Porter en su obra Competitive Advantage: Creating and Sustaining Superior Performance.
En el caso que nos ocupa, esta cadena de valor se ciñe al sector de empresas alrededor de la celulosa, el papel y el cartón, y como en todos lo modelos teóricos de cadenas de valor se centra en 4 puntos fundamentales:
- Abastecimiento
- Infraestructura
- Recursos humanos
- Desarrollo de tecnologías e investigación
Así pues, el estudio parte desde la obtención de materias primas (en este caso madera) para la industria y su impacto positivo en el medioambiente al ser una tala controlada de árboles previamente plantados para tales fines. A continuación analiza las infraestructuras del sector y de todas la empresas que intervienen en la cadena de valor. También las cifras referentes a puestos de trabajo y empleos relacionados con la celulosa, el papel y el cartón. Y por último, los avances tecnológicos llevados a cabo por las empresas que intervienen en la cadena y repercusión positiva en la sociedad.
Finalmente, las cifras y los resultados referentes a la cadena de valor de la celulosa, el papel y el cartón son del todo concluyentes a la hora de demostrar el efecto positivo a todos los niveles que ésta tiene en nuestra sociedad y nuestro entorno.
Os dejamos el estudio completo en formato PDF para que podáis descargarlo y leerlo en profundidad.
Es extenso, pero merece la pena dedicar unos minutos a su lectura.
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